La semana de la moda en París está en su punto álgido. Ayer con la presentación de Christophe Decarnin para Balmain quedó latente. El diseñador lanza una mirada a la mujer rockabilly. Chaquetas de motorista con brillos y cristales complementan el look ¨destroyer¨ con pantalones totalmente despedazados, blanqueados y con corpiños que se ajustan como una segunda piel. Hubo un guiño a los EEUU en sus camisetas. El diseñador ha pensado en una mujer de rompe y rasga que recuerdan a las jovencitas del musical Grease de los años setenta.
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